En este ensayo, Susan Sontag analiza cómo las enfermedades, en particular el cáncer, han sido utilizadas históricamente como metáforas en la sociedad. Sontag busca despojar al cáncer de su estigma simbólico, argumentando que es simplemente una enfermedad y no un reflejo de la corrupción o injusticia social. A través de su análisis, la autora invita a una reflexión profunda sobre la percepción y el tratamiento de las enfermedades en el contexto cultural y social.