- Estamos en el siglo XVIII, apoteosis de la Ilustración y Siglo de las Luces. El vitriólico Voltaire creía en las virtudes de la razón, la ciencia y el arte como artífices del progreso civilizatorio y el explosivo Rousseau sostenía que tales factores arruinan la libertad y la inocencia del hombre, que es bueno ?íel buen salvaje!? mientras permanece vinculado a las pautas de la naturaleza. Hélas! Tan antagónicas posiciones encizañaron la amistad de dos polemistas natos y corrosivos que, hacia 1741, habían unido recursos en torno al luminoso y transformador proyecto de la Encyclopédie.