Topper Bopper en color plata fabricado por Hot Wheels en Hong Kong en 1985.
La carlinga/cabina tiene dos partes, según el coche esté dañado o no. Es de la serie Crack-Ups que eran coches que al darse un golpe simulaban daño real, ya fuera en el frontal, en una puerta, en la parte trasera, o, como en este caso, en el techo.
Al ser juguetes cuya "gracia" estaba en darle golpes, es muy difícil encontrar unidades en tan buen estado de conservación. Incluso las tampografías están muy bien conservadas.
Las fotos de coches están tomadas con flash, para que puedas apreciar mejor los defectos. Mira las fotos, porque es exáctamente lo que estás comprando.
Casa sin animales ni fumadores.